Los terremotos se miden en términos de fuerza, duración y ubicación. Cuando se cifra su intensidad, se está midiendo su capacidad de destrucción; cuando se habla de su magnitud, se alude a la energía que ha liberado. Para medir la intensidad de los terremotos existen varios instrumentos científicos y escalas comparativas. Mientras el sismógrafo mide todos los parámetros, se utilizan varias escalas para interpretar los datos. Las más conocidas son la escala Mercalli modificada y la escala de Richter. Existen, no obstante, otras maneras de medir sus catastróficos efectos. Esta infografía de la colección Ábaco corresponde a la serie Catástrofes, a la que también pertenecen los títulos: Tsunamis, Desgarro profundo, Ondas elásticas y Zonas de riesgo.